Pensamientos V/S Hechos capitulo 3

Capitulo 3:

Junsu llevaba más de un mes viviendo en la zona central de Seúl, se cambió tres días después de lo ocurrido con Jaejoong y este ya no trabajaba en el restaurante, le hubiera gustado pensar que no era por su culpa, pero en el fondo sabía que si Jaejoong no hubiera renunciado Yunho lo hubiera corrido

-Junsu, despierta, te he hecho el desayuno- el peli negro se levantó con pereza y vio a su sonriente novio dejar una bandeja sobre sus piernas, Yunho solo llevaba los bóxer y Junsu aún estaba desnudo debajo de las sabanas

-déjame vestirme antes- intento levantarse pero el otro no lo dejo

-come así, es más sexy- Junsu comenzó a reír, Yunho rodeo la cama y se acostó al lado del menor para comer juntos

Todo iba de maravillas con Yunho, era cariñoso, siempre lo cuidaba, lo mimaba y trabajaban juntos, además de vez en cuando Junsu se quedaba en casa de Yunho o viceversa

El poco tiempo que lograban pasar junto era suficiente para Junsu, pero cada vez iba siendo más y más escaso, había veces que Yunho no llegaba a cenar u otras en las que no llegaba en toda la noche, en realidad Junsu no les prestaba demasiada importancia, jamás fue alguien celoso… pero que fueran tan constantes le inquietaba

Hoy era su primer aniversario, el restaurant iba cada vez mejor, Yunho tenía 4 iguales y todos habían sido decorados por Junsu, el decorado les había encantado a los clientes y Junsu estaba pensando seriamente en entrar a la Universidad a estudiar decoración de interiores

-Junsu, mira traigo un amigo para que lo conozcas, somos amigos desde pequeños- el menor miro y se encontró con un joven bastante atractivo

-vaya, tú te rodeabas de pura gente bonita- Yunho y su amigo rieron ante el comentario

-su nombre es Yoochun- Junsu le dio la mano, aunque apreciaba que su novio le hubiera querido presentar a su mejor amigo, hoy era su aniversario y para pasar un aniversario era ideal que la pareja estuviera sola… pero ya que, se vería terrible que Junsu echara al amigo de Yunho… Yoochun

-bueno, ¿vienen a comer?- ambos asintieron efusivamente, supuso que no habían comido nada y acto seguido fue a la cocina a preparar los platos mientras ellos ponían la mesa

Después de mucho pensarlo Junsu decidió matricularse en la universidad y estudiar diseño, Yunho no estaba muy convencido pero eso al menor no le importaba en lo absoluto

-hola soy Junsu y entre a diseño porque me encanta el arte- se presentó ante sus compañeros y así siguieron los demás, luego de la bienvenida se fue a recorrer la facultad, era un lugar enorme en el cual era fácil perderse, en un momento llego a unos subterráneos que estaban poco iluminados, dignos de una película de terror

-hola- Junsu salto y pego un grito agudo ante la sorpresa, allí sentado en el suelo con la espalda apoyada en la pared había uno de los chicos que estudiaba diseño con él

-hola, me has asustado, has aparecido como de la nada- aquel chico comenzó a reír

-lo siento, pero te veías tan angustiado que pensé que debía ayudarte, soy Changmin- al chico alto se paró y le tendió la mano a Junsu en forma de saludo

-como no estar angustiado si estoy seguro que en cualquier momento sale un asesino de esas salas- ambos rieron por las ocurrencias y así siguieron conversando en un ambiente relajado.

La primera vez que Junsu vio a Changmin le dio la impresión de ser una persona que no representaba su edad, se veía más mayor y tenía un rostro que indicaba madurez, después cuando logro hablar con él, se dio cuenta que era todo lo contrario, un loco hijo de puta (dicho con la mejor de las intenciones) que le hacia reír hasta en clases, tenía unas ocurrencias bastante tontas y descolocadas pero graciosas, las cuales les habían costado más de una reprimenda por parte de los profesores

-Hola Su… ¿Quién es el?- Yunho iba entrando a la casa de Junsu con una sonrisa incrustada en el rostro pero todo cambio cuando vio a aquel joven alto y de tez morena al lado de su novio

-ha, hola Yunnie, él es Changmin, un compañero de universidad, estábamos haciendo un boceto, es un trabajo en parejas así que lo hemos hechos los dos juntos- su rostro no cambio mucho al saber aquello, lo veía, en los ojos de aquel chico, era más que obvio que a ese tipo le gustaba Junsu, el único idiota incapaz de verlo era el propio Junsu

-bueno, yo venía a verte pero veo que estas ocupado, así que- fue cortado por la voz del más bajo -no, no te vayas, si con Minn podemos terminar otro día, ¿verdad Minn?- Changmin asintió y luego de pararse y despedirse de Junsu se retiró sin siquiera saludar a Yunho

-tu amigo es extraño- comentó

-Changmin es muy amable y buen chico, además está loco- Junsu río ante esto último en cambio Yunho se asustó, no sabía si lo decía como broma o en serio

-¿por qué?, ¿es raro o…- no pudo terminar, le daba cierto susto tratar con alguien enfermo

-no, está loco, toma medicamentos y va al psiquiatra- los ojos de Yunho no pudieron abrirse más

-debes tener cuidado con él, es inestable, no, quizás te haga algo Junsu- el más bajo lo miro mal

-no seas idiota como la mayoría de la gente por favor, que este enfermo no quiere decir que haya que tenerle miedo, o tú le tienes miedo a alguien con cáncer, a alguien lisiado, no cierto- el enojo en la voz de Junsu era evidente

-o bien, vete con el loco entonces- se paró y se fue de la casa, Junsu se quedó observando la puerta mientras gruesas lagrimas caían por sus mejillas, pero no creía haberse equivocado, estaba bien defender a su amigo

-Junsu, tienes enormes ojeras- comento Changmin ese día, era cierto, hace un tiempo que su relación con Yunho no iba bien del todo y los estudios tampoco le dejaban mucho tiempo libre

-estoy bien, ¿y tú?- Changmin se subió la manga de la camisa y allí, en el brazo pudo divisar una serie de pinchazos

-voy mejorando- Junsu miro cada uno de los puntos amoratados

-no me gusta esa medicina, ¿Qué ocurre si la dejas?- la mano de Junsu fue inconsciente hasta el brazo del más alto, pasando la yema de sus dedos por cada pinchazo como si un dibujo estuviera haciendo

-soy inestable Junsu, eso pasa si la dejo- no quería persuadirlo, si Changmin estaba bien con que le pincharan, él no tenía nada que decir, pero por alguna razón le dolía profundamente cada moretón

Yunho iba camino a su tienda, se sentía enormemente frustrado, amaba a Junsu, siempre lo amo desde que llego a trabajar para él, pero desde que comenzó a estudiar todo había cambiado demasiado drásticamente y lo extrañaba, extrañaba su dulce vocecita, su calor, su cuerpo, sus ojos soñolientos en la mañana, lo quería para sí mismo a cada minuto, cada hora, cada segundo… necesitaba una salida, algún tipo de escape

Junsu llegó a la casa de Yunho, estaban las luces apagadas, aun así entro, tal vez podía dejarle aquel regalo sobre la mesa a Yunho, le había horneado un pastel para demostrar que aunque no lo viera, igual lo recordaba

-¡Yunho!- se asustó al escuchar aquello, si había alguien, entro hasta la última pieza y lo que vio le congelo el cuerpo, Yoochun y Yunho estaban enredados en un frenesí de pasión… no sabía cómo reaccionar… ¿qué hacia?, ¿entraba y le pegaba o simplemente se iba?

Dejo una nota sobre el pastel y se fue cerrando la puerta suavemente, no quería llegar a su casa, ya no le gustaba ese departamento, pero, ¿Dónde podía ir? Automáticamente él apareció en su mente

-¿sí?- se escuchó su voz en el teléfono

-Minn, estoy aquí afuera, ¿puedes abrirme?- la puerta se abrió unos segundos después, Changmin miro a su compañero, tenía los ojos llorosos y se veía demacrado, eso le dolió mucho, sin pensarlo mucho lo hizo entrar a su casa y lo abrazo, casi queriéndose fundir con él, queriendo recibir su pena para llevarla ambos y no recayera toda sobre los delgados brazos del más bajo

Changmin hizo que Junsu durmiera en la pieza de invitados, este último le contó todo, ese Yunho la había hecho de oro, ahora que Junsu estaba dolido el aprovecharía y quitaría a ese sinvergüenza de su corazón.

El sonido de su móvil le despertó, sentía su cabeza algo pesada y le ardían los ojos, lo único que quería era que esa chatarra parara de sonar por lo que contesto sin mirar el numero

-alo-

-Junsu, hola, te llamaba para que salgamos hoy, ¿te parece?- el escuchar su voz tan alegre solo logro quebrar un poquito más su ya roto corazón, ¿podría perdonarlo?... la respuesta era obvia

-vete a la mierda Jung Yunho- corto y lo lanzo lejos. La puerta de su habitación se abrió dando paso a Changmin que venía con una bandeja

-hola Su, buen día- le dejo la bandeja sobre las piernas, le había preparado el desayuno, algo muy amable de su parte

-gracias Minn, perdón por llamarte anoche tan tarde pero… realmente necesitaba a alguien- comenzó a comer, estaba decidido, olvidaría a Yunho y empezaría una nueva relación y esta vez la haría funcionar

-no te preocupes, yo siempre estaré para ti Su- ver esa sonrisa dedicada solo para él le hizo sonrojar y desviar la mirada, maldito Changmin que era tan bueno

Pasaban los días y Junsu se fue a vivir con Changmin, Junsu le pagaba la renta y ambos compartían gastos, había dejado su antiguo departamento porque no le traía bonitos recuerdos, no después de todo lo ocurrido

-Oye Su, vamos hoy a comer helado, ¿vale?- Junsu solo sonrió, ese chico aunque fuera alto y todo, como siguiera comiendo así se pondría una ballena

-No sé cómo eres tan flaco si comes tanto- se pusieron en marcha… ya habían pasado meses de su última conversación con Yunho, ahora estaba todo bien, la verdad es que no le tenía rencor, gracias a aquello logro encontrar a quien realmente le amara por cómo era, le aceptaba con todo, tanto sus defectos como sus virtudes

Así los días eran siempre diferentes y no había ningún mejor amigo por el cual Changmin lo cambiaría, ni golpes, ni nada... era simplemente perfecto... si, Changmin era perfecto porque lo miraba con ojos de enamorado pero a quien le importaba, después de todo eso hacia notar que Kim Junsu estaba enamorado de Shim Changmin

-Su, ¿hoy me acompañas al médico?-

-claro, quiero ver quien es tu psiquiatra, no dejare que te pongan una mano encima, eso solo puedo hacerlo yo- Changmin rió fuertemente, desde que comenzó a salir de novios con Junsu cambio sus dosis de medicina, ahora era medicación oral y menos gramos que antes

-lo haces sonar como si tu fueras el que manda- se burlo el más alto

-¿y no es así?- Junsu lo miro desafiante lo cual Changmin tomo como un reto, sonrió con esa mueca retorcida que le gustaba tanto a Junsu y lo acorralo a la primera pare que encontró

-claro que no Su... aquí yo soy tu dueño- lo dijo con una voz baja y profunda lo que hizo temblar al más bajo

-vale, vale ya déjame que llegaremos tarde al medico- Changmin se dejo guiar por Junsu, lo miraba de vez en cuando y le hacia gracias ver las mejillas sonrojadas de su novio, definitivamente lo molestaría más seguido

-haremos que esto funcione, ambos juntos- sus manos entrelazadas decían todo, aunque paso por muchas decepciones, como el dicho dice, la tercera es la vencida y vaya que le había servido todo aquello para por fin llegar a donde se encontraba ahora

-te amo Minn- el más alto le robo un casto beso

-yo igual maldito enano-

Bueno chicas, mis queridas lectoras (si es que queda alguna aún, perdon) aqui esta el final de esta historia, la verdad es que la tenia lista hace un tiempo pero mi computador ya no tiene microsoft office por lo q no tengo word para poder escribir las cosas y no me deja instalarlo tampoco, por lo que tuve que descargar un word portable para poder leer mis fics y cambiarles algunas cosas ^^

bueno, nuevamente pido disculpas por la demora U,U... pero ya publique y espero no pase mucho hasta que les traiga un nuevo capo de zombie attack ¡LO PROMETO, PRONTO, MUY PRONTO VENDRÁ ESE CAPO!

sin más que decir agradezco a las que están aun por allí esperando mis actuas y a las personas que leen mis fics

Por cierto, la foto no la hice yo, solo la encontré en Internet y me pareció perfecta xDD la he sacado de aquí (http://kogoyoko.deviantart.com/art/HoMinSu-332732242)