Rojo Vino- MinSu

Titulo: rojo vino

Parejas: Minsu

Advertencias: Lemmon

Clasificación: +18

Autor: Kiimiko

Resumen: Shim Changmin es un adinerado heredero que debe siempre asistir a fiestas de la sociedad y reuniones aburridas, en una de esas fiestas ve algo inusual y que llama mucho su atención al punto de casi obsesionar lo, lo que este no sabe es que aquello cambiara completamente su mundo y hasta su personalidad

Observaba a ese chico caminando por la estancia, su pelo castaño oscuro casi negro, sus manos y labios rojo guinda y sus ropas, una camisa negra con un traje blanco y una corbata roja furioso. Siempre le había cautivado el color rojo, era un color penetrante que llamaba la atención en cualquier lugar, sobre todo si era usado de esa manera sobre un cuerpo hermoso y un rostro delicado y perfecto.

Changmin estuvo mirando a ese chico mientras estaba en esa fiesta, era lo más interesante que había visto durante todos sus años yendo a esas aburridas fiestas. Shim Changmin era el heredero de una gran empresa familiar, por eso tuvo que ir a esas fiestas llenas de gente rica desde pequeño, siempre supo que tendría que hacer lo que lo demás le dijeran, su padre ya le tenía una novia para poder agrandar su fortuna, iría a la mejor universidad de Estados Unidos aunque él no quisiese y estudiaría administración de empresas… todo eso sin importar la opinión del propio Changmin

Miraba a todos lados buscando a su pequeño de color rojo hasta que lo vio mirando el vino que tenía en una copa, lo movía observándolo, lo curioso fue que al probarlo hizo una mueca de desagrado

-definitivamente lo único bueno del vino es su hermosos color y su textura- alcanzó a escuchar aquellas palabras salir de esos labios rojos, aquel chico dejo la copa sobre la mesa, apenas el más alto lo vio alejarse se acercó a esa copa que había sido probada por esos labios, tenía un poco de pintura en una de sus orillas. Sin pensarlo mucho el heredero de los Shim la llevo a sus labios y tomo un sorbo, por alguna razón este era el mejor vino que había probado

Volvió a buscar a su extraño de color rojo, sus ojos se movían inquietos en su búsqueda, sus piernas se movían rápido entre la gente hasta que, entre la multitud, alcanzo a ver unas manos con uñas rojo guinda, se acercó para encontrarlo apoyado en una pared blanca, sus ropas contrastaban hermosamente al igual que el color de sus manos apoyadas sobre esa blanquecina pared que se hacía absolutamente nada a su lado, definitivamente ese chico era hermoso, una tentación para las personas y un festín para la vista, cada vez que se movía, era como si lo estuviera llamando, lo cautivaba completamente y él quería que fuera suyo, quería a ese chico para él, lo cual no era bueno, se suponía que el tenia novia, no debía, pero, el solo pensar en lo que su mente le mostraba lo hacía desearlo más, tanto por la situación ; algo completamente prohibido; como por el personaje que las protagonizaba.

El más alto solo escuchaba las palabrerías de su futura esposa, la verdad es que no le interesaban en absoluto, creía que era un hueca y además estúpida, no sabía nada, definitivamente su padre la había elegido solo por el dinero y prestigio que tenía la familia de ella, por nada más. De nuevo todo se había vuelto aburrido, hace rato que no veía a ese chico; al cual Changmin apodo Rod que significa rojo en alemán; y su novia no hacía más que atosigarlo. Harto de la estupidez que desprendía su acompañante decidió irse con la excusa de que iba al baño, así logró escapar al balcón donde tomo aire para relajarse un poco, miraba todo aburrido, quería a Rod, lo necesitaba, quería tenerlo entre sus brazos, quería acariciar esa piel, saber cómo se oiría su voz al gemir, definitivamente se estaba volviendo loco.

Luego de tranquilizarse un poco entro nuevamente a la gran fiesta, la música lo estaba molestando y las personas que lo saludaban cada tanto también, aunque… tal vez si preguntaba por Rod a alguno de esos viejos ellos puedan darle información sobre el… decidido se acercó al más simpático que conocía

-buenas noches joven Shim, ¿Cómo está usted?- Changmin hizo una reverencia en señal de respeto

-muy bien y usted señor naranjo- el anciano asintió con la cabeza y una sonrisa en su rostro

-se hace lo que se puede joven- así siguieron conversando para no mostrarse descortés, una vez que Shim lo consideró suficiente decidió preguntar por su chico de rojo

-disculpe señor naranjo, de casualidad ¿usted conoce a ese chico que anda con uñas rojas y vestido con un traje blanco y negro?- el más alto vio al anciano fruncir un poco el ceño

-no debería juntarse con gente como el, a pesar de su corta edad es un joven que sabe de negocios y tiene una gran cadena de bares de distinto tipo, pero la procedencia del dinero con la cual comenzó es dudosa al igual que sus gustos, el mejor concejo que puedo yo entregarle es no acercarse a ese joven- Changmin asintió asombrado y aún más intrigado, hizo una nueva venia y se alejó de aquel anciano, ahora sentía aún más curiosidad por aquel extraño muchacho y le importaba bien poco los rumores, incluso si era cierto que había hecho algo ilegal o indebido, no le importaba, quería a ese chico y juraba que haría cualquier cosa por tenerlo, era la primera vez que le gustaba tanto alguien, nunca fue un chico caprichoso pero, esto, a él, lo necesitaba

 Changmin camino por el lugar buscando a su lindo espécimen, miro alrededor intentando encontrarlo, camino entre la multitud evitando a la gente interesada que se le acercaba al gran heredero Shim, solo quería a ese muchacho, ¿Por qué él no se le acercaba como los demás?, aunque, quizás si hiciera eso, no le interesaría tanto como lo hace ahora. Lo buscó incesantemente entre esa multitud de gente, ya comenzaba a creer que se había retirado cuando lo vio apoyado en un pared junto al escenario, sin pensar mucho y con el miedo de que aquel muchacho desapareciera en cualquier momento se acercó a el rápidamente y sin darle tiempo a escapar

-hola- Changmin se acercó, era más bajo que el por lo que le era fácil acorralarlo y obtener toda su atención. Sí se había vuelto loco, pero es que Rod lo hipnotizaba con sus labios, sus ojos, su cuerpo entero lo llamaba y el, como animal en celo respondía a su llamado

-¿Quién eres?- vio moverse esos hermosos labios rojos formulando aquella pregunta y quedando entreabiertos mostrando unos blancos y parejos dientes, era hermoso, quería seguir viéndolo, quería seguir escuchándolo

-Shim Changmin, ¿y tú?- sus labios se curvaron en una sonrisa que dejo sin palabras al más bajo, este revolvió su pelo dejando ver esas rojas uñas pasando por el pelo negro quedando un contraste hermoso y alucinante

-yo… soy Junsu, Kim Junsu- Junsu intento alejar al más alto pero le fue imposible ya que este ejercía presión sobre el acorralándolo aún más

-es un placer- vio como los ojos de Changmin lo miraban con deseo y como esa sonrisa traviesa comenzaba a hipnotizarlo, no, no caería

-déjame en paz- vio como Junsu intentaba alejarlo nuevamente, sin pensar mucho acerco sus labios a los ajenos quedando a centímetros, respiraba su aroma, era delicioso

-no quiero- el aliento de aquel alto desconocido le dio en el rostro, era atrayente, demasiado para su gusto

-de..- el más alto acorto la distancias para besarlo, pero antes de que ocurriera una voz lo interrumpió- Changmin, ven aquí, tu novia te llama- se giró y vio a su padre que lo miraba con malos ojos, se maldijo mentalmente y devolvió su vista a su presa

-de esta no te salvaras- dicho esto dejo al chico allí y fue hacia su padre maldiciéndolo de mil y una formas en su mente, por dios que odiaba a ese hombre en ese momento… más que de costumbre

Tuvo que aguantar toda la fiesta al lado de su novia, su padre no le quitaba los ojos de encima por lo que no pudo escaparse ni un segundo, así paso el tiempo, estaba aburrido nuevamente y acorralado entre la mirada de su padre y la palabrería de su novia, por dios que le hubiera gustado nacer como otra persona en este momento. Así termino la fiesta y Changmin no logro encontrarse con Junsu nuevamente, lo único que quería es que hubiera pronto otra fiesta para poder verlo.

………………………

Habían pasado casi cuatros semanas, iba por el mes y en ninguna de las fiestas a las que había asistido estaba aquel hermoso joven llamado Junsu, como es que podía desaparecer así como así

-ven Changmin, quiero que me acompañes a una reunión- el mas alto frunció el ceño ante el pedido de su padre, odiaba esos lugares, era tan aburrido ir, pero si se le ocurría negarse lo iban a castigar quizás con que cosa. Así a regañadientes subió al auto para acompañar a su progenitor

Changmin se sentó en una esquina un poco alejado para no molestar a los presentes, cada vez iba llegando más gente, hasta que lo vio, allí, no tenia las uñas pintadas ni los labios rojos, pero se veía igual o mas hermoso que esa vez en la fiesta

-buenas tardes señor Kim- saludo su padre educadamente, pero Changmin reconoció en los ojos de su padre odio, el tenia planeado algo con ese chico y fuera lo que fuese, no podía ser bueno

-buenas tardes señor Shim- así comenzó la reunión, hablaban de comprar acciones, de hacer fusiones entre diferentes empresas, de invertir mas en otras, en todo el rato Changmin lo se saco la mirada de encima a Junsu, se veía hermoso e imponente, por su mente lo único que pasaba era estar bajo esa mesa y hacer gritar a Junsu

-así terminamos con la reunión- todos iban saliendo de a uno, el padre de Changmin paso por su lado murmurando injurias hacia Junsu ya que en la reunión se había acordado que Junsu compraría acciones de las compañías Shim, así se quedaron solos Changmin y Junsu, este ultimo cerro la puerta con llave y se sentó sobre la mesa mirando al más alto

-así que el joven Shim sigue los pasos de su padre- soltó con saña Junsu, odiaba a ese tipo, intento muchas veces quitarlo de las empresa, incluso intento secuestrarlo, afortunadamente Junsu sabia como defenderse y logro zafarse de sus manos, pero ahora estaba su hijo aquí, mas bueno que un dios griego y se le notaba contento con quizás que cosas que se había imaginado

-no- Changmin se posiciono rápidamente entre las piernas de su lindo espécimen y agarro sus muslos para impedirle escapar esta vez

-¿a no?, y que harás, enfrentarte a él, mmm…- Changmin comenzó a dar besos en el cuello de Junsu mordisqueando aquí y allá, no intento alejarse, ni siquiera lo empujo

-si, y si tu quedas como premio para mi, con mas razón le enfrento- así azoto sus labios contra los de Junsu mordiendo y succionándolos para luego introducir su lengua y saborear esa húmeda cavidad que lo hacia enloquecer. Junsu ya perdido se aferro a los hombros de su acompañante y se dejo hacer, total, que mas daba, un buen polvo no le vendría mal

-te deseo tanto- al escuchar esto Junsu se acostó sobre la mesa con sus manos sobre la cabeza, miraba a Changmin con deseo, este solo atino a subirse sobre el y comenzar a despojarlo de sus ropas

-Chang…min haaa- estaba saboreando sus pezones con gula, y su mano se colaba traviesa por dentro del bóxer tomando el endurecido miembro de Junsu y comenzó a masturbarlo, era adictivo, le encantaba su sabor, así bajo por su abdomen hasta llegar a su cintura, allí saco de un tirón todas las prendas y sin esperar mucho comenzó a saborear la hombría de su lindo Junsu, su lengua saboreaba toda la longitud y al llegar a la punta succionaba pronunciadamente, los gemidos de Junsu no se hicieron esperar, iban acompañados de su nombre lo cual le excitaba aun más

-córrete Junsu, quiero saborearte- el mas bajo araño la mesa al llegar al orgasmo y un gemido ahogado salió de sus labios

-Changmin… ha, ha estado bueno- Shim sonrío de medio lado y de un tirón hizo que se parara y lo atrajo hacia si, sus manos bajaron desde sus hombros hasta su espalda llegando a su trasero

-¿sabes que te gustara más?, cuando entre aquí- uno de los largos dedos de Changmin se introdujo intruso en la entrada de Junsu el cual al sentirlo hecho su cabeza hacia atrás, aprovechando esto, el otro lo beso con pasión devorando su boca, jugando obscenamente con su lengua mientras sus dedos hacían el trabajo allí abajo

-Changmin, no haaa, no te creas que… seré el de abajo- de la boca de Changmin salió una carcajada, el ver como Junsu disfrutaba con solo sus dedos hacia casi irrisorio ese comentario

-creo que deberías probar cosas nueva… te gustara sentirme adentro- Junsu gimió más alto cuando Changmin comenzó a embestirlo con sus dedos, si así se sentía tan bien, con el pene de Changmin se sentiría mucho mejor

-Chang…min, ya, métemelo- Junsu se alejó y apoyo sus dos manos en la mesa dejando su retaguardia hacia Changmin el cual al verlo se excito más si es que era posible, sabia que cederia, apresurado desabrocho sus pantalones y de una embestida entro en esa deliciosa estreches, escucho quejarse a su compañero, para que se relajara comenzó a besar su nuca y a masturbar su miembro

-muévete- así ambos comenzaron una vaivén demencial, los gemidos sonaban en la sala haciendo eco, junto a los crujidos de la mesa que amenazaba con colapsar bajo tanto peso y movimientos bruscos.

En este momento Junsu agradecía que desde afuera no se escuchara nada, así daba rienda suelta al placer.

……………..

Changmin llego a su casa con una cara de idiota, que hasta aguanto a sus padres y a su novia sin molestar, converso, estaba eufórico por lo que había pasado además, después de probar el cuerpo de ese hermoso chico, no podía parar, se había hecho completamente adicto, definitivamente valía la pena ir contra todo por Junsu.

…………………….

Changmin se encontraba tirado sobre su cama, habían pasado dos meses desde ese encuentro con Junsu y lograba verlo muy poco, en parte porque su padre no lo dejaba en paz y ahora quería adelantar la boda, definitivamente eso no era bueno.

Unas semanas luego de que su padre anunciara la fecha de su boda, ambos comenzaron una pelea de grandes proporciones

-Tu harás lo que yo te diga, para eso te he criado- gritaba el señor Shim a su desobediente hijo

-me importa un bledo lo que me digas, yo no quiero casarme con esa tipa, quiero estar con otra persona-

-a ver con quien, con ese marica, el tal Kim Junsu- Changmin lo vio todo rojo, como se atrevía a insultar a su lindo empresario

-si quiero estar con el, quiero fallármelo todos los días, quiero pasar todo mi tiempo a su lado, no junto a una hueca como Boa- su padre monto en cólera y por primera vez golpeo a su hijo mandándolo al suelo

-yo no tengo un hijo gay, tu te vas de mi casa en este instante-Changmin lo miro con profundo odio y salió rumbo a su habitación para arreglar sus cosas y lograr irse de una vez por todas

…………….

Junsu sintió que tocaron la puerta, al abrirse su sorpresa fue inmensa al ver a Changmin con una maleta en la mano

-¿Qué haces aquí’, ¿y con una maleta’-

-me echaron de casa, le dije lo nuestro a mi padre- Junsu no sabia si reír o llorar, definitivamente ese chico era un pastel de primera

-pasa- el rostro del menor se ilumino, aunque se sentía mal al tener que estar en la casa de Junsu, apenas tuviera dinero le pagaría absolutamente todo, de hecho desde mañana mismo comenzaba a buscar trabajo

Su padre no le quería, no tenia casa, no tenia mucho dinero, pero… si Junsu sentía el mismo amor que sentía Changmin, el haberse ido de la casa había valido la pena, aunque siguiera teniendo a su padre encima todo el tiempo, no se sentía tan presionado como antes

…………………….

-Vamos Changmin, ¿vas en serio?- Junsu le preguntaba a su, ¿Cómo podría llamarlo?, algún tipo de compañeros con ventaja quizás

-claro que si, ya me he ido de casa y estoy estudiando medicina, ayer hable con mi padre y le deje todo bien claro para que no me moleste mas, ni a ti ni a mi- eso ya era mucho, Junsu definitivamente pensaba que Changmin se había vuelto loco, es decir, no se conocían hace tanto, pero parecía que el mas alto lo amaba casi con idolatría

-mira Minn, sé que tu quizás estas obsesionado conmigo, ni me conoces como para que estes haciendo tanto- Changmin se acercó a Junsu le beso en los labios de manera dulce para demostrarle cuanto lo amaba

-yo te amo, no sabes cuanto, me importa muy poco que hayas hecho, lo importante es como eres ahora- Junsu lo miro sorprendido, él había hecho muchas cosas para lograr llegar hasta donde se encontraba, en un principio fue prostituto, acompañante, camarero, bailarín, barman, había trabajado de tantas cosas

-Changmin yo, no se- el mas alto se fue a sentar al sofá rojo que había en la oficina de Junsu y palmeo unas cuantas veces sus piernas indicándole al mayor que se sentara sobre sus piernas, Junsu lo miro un poco incomodo al principio pero, hizo caso, apenas se sentó los brazos de Changmin rodearon su cintura y su mentón se apoyó en su brazo

-no te das cuenta de lo bien que encajan nuestros cuerpos, y lo mucho que te cuidare, Junsu- el mayor lo miro a los ojos, lo único que vio fue sinceridad, una entrega casi ciega de su acompañante

-es, esta bien- Changmin tomo en sus brazos al mayor y comenzó a dar vueltas riendo escandalosamente, Junsu se agarró a su cuello asustado de caerse

-no te arrepentirás Su- Changmin beso a Junsu en los labios y salió corriendo a buscar un trabajo, Junsu logro gritarle antes de que desapareciera

-Minn, quiero que trabajes conmigo- toda la oficina se dio vuelta sorprendidos por ver al comúnmente frio Kim Junsu rindiéndose ante Changmin, este ultimo llego casi en un instante al lado del mayor y jalándolo de la mano lo entro a la oficina para alejarlo de las miradas de curiosos

-no me gusta como te miran tus trabajadores- comento el menor con el ceño fruncido, Junsu comenzó a reír ante las ocurrencias de su ahora amante

-no te preocupes Minn, el primero que intento tocarme se fue de patitas a la calle y aun no consigue trabajo, tengo varias influencias en el mercado. Ahora deberías darte cuenta de lo afortunado y especial que eres-

-tu eres mio, solo mio- Changmin atrajo posesivamente a Junsu hacia su cuerpo pegándolo haciendo friccionar sus cuerpos

-Minnie, haa, no seas pervertido estamos en mi oficina- Changmin rio sobre el cuello de Junsu ante lo irónico que sonaba aquello

-la otra vez en la sala de reuniones no te importo- Junsu sonrió y se dejo hacer nuevamente, definitivamente ese chico ya lo tenia completamente a su merced

…………………..

Ambos chicos se encontraban en una fiesta, la misma donde se conocieron, se hacia todos los años, solo que ahora no estaba ni su novia, ni su padre para molestarlo puesto que se había ido preso por malversación de fondos

-eres un idiota- Junsu estaba sentado sobre el lavamanos mientras Changmin bajaba cada vez mas hacia su amiguito ya despierto

-a ti te gusta lo que te hace este idiota, sino, no seguirías conmigo después de tanto tiempo, sr Shim- Junsu sonrió y atrajo a su esposo para poder besarlo

-supongo que tienes un punto-

-hey, quiero entrar al baño- ambos se miraron avergonzados ante el grito proveniente de afuera, salieron un poco desarreglados y ambos avergonzados con las mejillas sonrojadas.

Quien pensaría que todo comenzó con el cautivador color rojo en un lindo chico, combinación perfecta para el destino de Changmin.








Bueno, he vuelto con un oneshot, ha sido largo como compensación por tanto tiempo sin poner nada, y porque soportaron mi lloriqueo cuando mi computadora me dejo XDDD
ojala les aya gustado ^^