Happy B-Day Junsu

Titulo: Happy B-Day Junsu

Pareja: MinSu

Autor: Kiimiko

Advertencias: Lemmon

Extención: Oneshot

Me encontraba haciendo planes para hoy en la noche, iba a salir con mis tres amigos, uno era un casanova por experiencia, Yoochun, el otro era medio fifi pero agradable e igual de casanova que el otro, Jaejoong y el ultimo era Yunho un tipo que suelta feromonas masculinas por todas partes, estos tres han sido mis amigos desde que tengo memoria. Pero como yo soy el más bueno pal webeo, me encontraba buscando buenos lugares donde ir de fiesta en la noche, aunque ninguno me llamaba mucho la atención, la mayoría ya eran bastante conocidos, deseaba buscar algo nuevo, algo inesperado y desconocido. Sonó mi celular mientras buscaba en internet, mire la pantalla, era Jaejoong, apreté el botón verde para contestar mientras seguía buscando lugares.

-Junsu, ¿y encontraste algo de tu interés?- me quede en silencio un rato viendo la pantalla del notebook

-la verdad es que no, aun no… no espera, aquí hay algo, “el infierno y el paraíso”- era una pagina color negro con rojo en una mitad y blanco con celeste en la otra mitad

-hui que sexy suena eso, dale entonces de allá somos- yo reí ante su comentario, algo raro le pasaba a estos compadres, estaban súper sumisos conmigo cuando la realidad es que les encanta molestarme… no le di importancia y llame al local para preguntar si era necesario hacer reservación o se podía entrar sin nada, se iba y se entraba. Luego quedamos de juntarnos unas horas antes para que el impuntual de Yoochun llegara a tiempo, ese tipo, tu le dices a las ocho, el culiao llega a las nueve.

-Cabros, el rey ha llegado- estaban Yunho y Jae hablando súper pegados, me importo bien poco interrumpirlos

-no pudiste haber llegado en peor momento- Jae se veía enojado

-por allá atrás hay unos matorrales, vayan a hablar por allí- me gane un golpe de Jaejoong y Yunho, pero que se hacían tanto problema si era obvio que esos dos se querían puro dar

-el loco desubicado- le mostré mi sonrisa más inocente a Yunho, su rostro se suavizó, eso siempre funciona, con los tres

-¿y el casanova?- ambos me miraron como si no hubieran entendido, luego de unos segundos ambos se dieron cuenta de a que me refería

-me llamo hace poco, viene para acá- mire la hora en mi celular, eran las nueve de la noche, de mas que se demora su media hora mas. Grande fue mi sorpresa al verlo aparecer, fue puntual, eso me dio mala espina

-¿y tu que onda que vienes tan puntual?- me observo con una mirada que decía “como siempre”, le pegue en el hombro

-ya, ¿vamos?- así los tres nos subimos en el auto de Yunho, igual quedaba lejos el bar, pero logramos llegar en unos veinte minutos, el lugar era increíble, al entrar te daban unos cachitos o una aureola, yo, Yunho y Yoochun elegimos cachitos y Jae eligió la aureola

-jajajaja míralo, loco mentiroso- me burle de Jae, el hizo ademan de que no le importaba y se acercó mas a Yunho, llegamos los tres a una mesa con sillones, yo pedí un mojito y los otros tres pidieron piscola y roncola

-ya Junsu, vinimos aquí por una razón muy importante- comenzó a hablar Yunho, yo tomaba mi vaso mientras para entrar en confianza, el lugar por dentro era súper cool, los sillones eran de cuero negro y la mesa blanca, habían luces de colores y la acústica de la música era súper buena

-si weon, y espero que agradezcas porque hoy pagamos nosotros, así que toma con mesura- hablo ahora Jae, que onda estos tipos, no se habían ni tomado un sorbo de su vaso como para hablar tanta incoherencia junta

-feliz cumpleaños Junsu- dijeron los tres al mismo tiempo, yo quede en shock, deje mi vaso haciendo un sonido fuerte sobre la mesa

-los weones perdidos, loco, si no saben por favor pregunten, como tan imbéciles, mi cumpleaños es mañana trio de descerebrados- deje el vaso allí y me fui a la barra lejos de estos tontos, es decir, igual que amable que quisieran celebrar pagando pero… no, como tanto, por ultimo, esos conocen a mi hermano, llamarlo y preguntarle para estar seguros, trio de idiotas

Me senté en la barra y peri una cerveza, casi nunca tomaba cerveza, me era desagradable pero, no se solo tenia ganas de probarla, aunque al primer sorbo arrugue el entrecejo y mi cara se contrajo

-jajajaja, al parecer no te gusta mucho beber- mire a mi lado, allí había un joven mas o menos de mi edad, era alto, su pelo oscuro y se estaba riendo de mi

-es demasiado amarga, solo eso- la tome de un sorbo aunque cuando la termine encogí los hombros, es tan mala

-si, me doy cuenta por tus gestos, soy Changmin, Shim Changmin, y ¿tú eres?- lo mire unos segundos, no parecía mala persona, tal vez un poco vanidoso pero más que eso

-me llamo Junsu, Kim Junsu, es un placer- tomo mi mano y la beso, yo la quite enseguida sintiéndome extraño por el contacto, él sonrió de medio lado

-y Junsu, te vi entrar con un grupo de amigos, ¿por qué no estas con ellos?- eso significaba que me había visto desde antes, supongo que esta interesado en mi, bueno es inevitable si soy tan lindo, atraigo miradas… bien eso sonó muy vanidoso

-pues pasa que mis amigos me invitaron aquí para celebrar mi cumpleaños hoy cuando en realidad es mañana, son unos idiotas- él se hecho a reír, parecía que moriría de la risa, con sus brazos se apretaba la guata y se paro de la silla para no caerse- sabes, a mi no me hace ninguna gracia- el pedía disculpas mientras intentaba parar de reírse

-lo siento, lo siento mucho, es que, es un poco tragicómico, bueno, que tal si para que se te pase el mal humor vamos a bailar- no alcance a contestar él ya había tirado de mi brazo hasta que llegamos al centro de la pista de baile, el comenzó con movimientos lentos invitándome a moverme junto a él, le iba a demostrar que yo podía bailar mejor que cualquiera. Escuche la música para comenzar a sentirla dentro de mi cuerpo y me deje llevar, movía mis caderas de manera sensual y lo mire a los ojos invitándolo, lo que hizo no me lo esperaba se veía tan… quizás no tímido pero si cuidadoso, pero sin ningún pudor alguno poso su mano en mi cadera y paso una de sus piernas entre las mías, friccionaba nuestros cuerpos en una danza sensual, el calor me invadía de a poco, mis mejillas ardían ante su atrevimiento y el, el solo sonreía de medio lado mirándome siempre a los ojos.

Ambos nos fuimos a sentar nuevamente a la barra, yo pedí una bebida con hielo ya que el calor me carcomía por dentro, él se tomo una piscola de un viaje, intente ignorarlo y busque a mis amigos con la mirada

-es que estas asustado de que el lobo te coma, ¿por eso buscas a tus amigos?- lo mire con enojo, que se creía que yo era una damisela o que

-¡JA! Pero que chiste mas bueno- el soltó una carcajada, se paro del banquillo y se puso frente a mi acorralándome entre el y la barra, sus manos estaban apoyadas en la barra y el se encontraba entre mis piernas

-si tu crees que es un chiste, a mi no me importa, desde que entraste que te estaba observando tienes un trasero muy bonito y tu carita es muy linda, quiero hacerte tantas cosas- este tipo estaba loco, como mierda podía ser tan sincero, me dio algo de vergüenza lo que me dijo pero aun así me quede allí desafiándolo

-pues que pena, ve a buscarte a otro, yo no pienso ir abajo y obviamente tu tampoco- lo empuje, mejor me iba a mi casa, sino mañana no iba a poder ni abrir un ojo. Salí del local, afuera estaba helado, ahora debía encontrar un taxi, maldita mi suerte por no tener auto.

Estaba caminando bajo la noche, no se si me había vuelto loco o que pero pensaba caminar hasta mi casa, mi billetera se me debió haber caído en algún lugar, Llevaba casi dos cuadras cuando sentí una bocina detrás de mí, me gire y las luces me enceguecieron por lo que no pude ver quien iba sobre el auto

-ven te llevo- esa voz la reconocí enseguida, era Changmin, pensé en negarme pero no tenia ganas de caminar hasta mi casa, fui hasta la calle para subirme por el lado del acompañante. Íbamos ambos callados, no sabia que decir, después de lo que me había dicho en el bar me sentía algo cohibido

-y, por donde es tu casa- se me había olvidado ese detalle

-es cerca del complejo deportivo- el asintió dándome a entender que sabia donde era

-eso esta muy lejos, aun así pensabas irte caminando, de seguro tienes mucha resistencia física, me gustaría probar que tan resistente eres en la cama- es que este tipo no tenia pudor alguno

-es que no te da vergüenza, eres un lanzado- me cruce de brazos y mire por la ventana

-¿no crees en el amor a primera vista?, apenas entraste pensé que eras hermoso y violable-

-¡eres un idiota!- el comenzó a reír, como se le ocurre decir esas cosas, menuda forma de ligar con alguien, es un descerebrado aunque admito que es guapo y divertido

-bien, hemos llegado, que descanses y levántate temprano mañana- lo mire, aun me encontraba enojado, me iba a bajar pero tomo mi brazo haciéndome caer hacia atrás y beso mis labios, fue solo un roce pero basto para que mis hormonas se revolucionaran- ten, no deberías andar olvidando tus cosas en cualquier parte- me extendió mi billetera, la debí dejar sobre la barra

-chao- él no se fue hasta que entre en el edificio. Llegue a mi departamento, ordené un poco ya que hoy salí sin hacer nada, me sentía agotado y mareado, maldito Changmin. Tome mi celular para avisarles a mis amigos que había llegado bien a mi casa, les envié un mensaje y lo deje sobre la mesita de noche, me acosté sobre la cama sin cambiar mi ropa y fui cayendo lentamente en los brazos de Morfeo.

Un sonido muy molesto me despertó, mire a los lados para encontrar mi celular, estaba en el cuelo, lo mire pero no era este el que sonaba, me levante para seguir el sonido, era el timbre, tome el teléfono para ver que quería la recepción

-señor Kim, aquí hay un chico que quiere verlo, es señor Changmin- que hacia ese tipo aquí y tan temprano, y como supo cual era el numero de mi departamento

-dile que suba- colgué, saque mis ropas rápidamente y me metí a la ducha, fue una ducha híper rápida, Salí y fui corriendo a mi cuarto, no podía dejar que me viera así, me puse la ropa interior, los calcetines, un jeans gastado color negro y una polera rayada morada con negro de manga corta. Sonó el timbre, me puse las zapatillas y luego de desordenar un poco mi pelo abrí la puerta, lo que vi me dejo sin aire, él se veía espectacular con un jeans azul y una musculosa azul aunque lo que mas me sorprendió es que traía flores y un regalo

-es que soy tan bello que no puedes dejar de mirarme- fruncí el ceño, maldito vanidoso

-pasa- menos mal que ordene anoche, sino este lugar seria un desastre

-feliz cumpleaños Sunnie- lo mire receloso por ese sobrenombre tan… dulce

-gracias Minn- me entrego las flores y la caja, deje la caja encima y fui a llenar el florero con agua para dejar las flores- aunque es un poco extraño que me traigas flores, soy hombre- el hizo una mueca

-¿por qué tanta manía por demostrar que eres hombre?, de eso me doy cuenta fácilmente, eso no me quita las ganas de acariciarte y besarte- tenia que salir con una de esas cosas

-es solo, ha déjame en paz- abrí el regalo emocionado pero sin demostrarlo, eran entradas VIP para un restaurante bellísimo, lo mire intrigado, en su rostro solo había una gran sonrisa

-bueno, ahora, como es en la tarde la comida deberíamos divertirnos un rato- la forma en que lo dijo me sonó muy pervertido, él se paro del sillón para ir hasta donde me encontraba, me pare para desaparecer del lugar pero fue más rápido y me acorralo a la pared, la verdad es que no estaba asustado, pero me era extraño

-eres un pervertido- su mano masajeaba mi entrepierna por sobre la ropa, yo apretaba sus hombros y no podía impedir que los gemidos salieran de mi boca

-tranquilo, hare que te sientas muy bien- su lengua lamia mi cuello, no podía evitarlo se sentía muy bien, su mano no se detenía seguía masajeando mi miembro lo que me hacia temblar, aun así saque todo el autocontrol que tenía y lo empuje al sillón para sentarme a horcajadas sobre él

-así se siente mejor- movía mis caderas friccionándolas con las suyas mientras nos besábamos, ambos sabíamos perfectamente lo que queríamos y yo no quería esperar más. Me pare y saque mis ropas lo mas sensual posible, él no quitaba sus ojos de encima

-eres tan sexy- él también se paro, ambos quedamos desnudos, sus manos masajeaban mis glúteos cuando un dedo se metió en mi entrada

-que… ha mmm. Que crees que haces- metió un segundo dedo y el tercero, comenzó envistiéndome con su mano, yo no quería ir abajo pero se sentía tan bien

-shhh, te va a gustar, date vuelta- su voz cargada de deseo me hipnotizaba, me puse en cuatro sobre la alfombra, aunque esa posición me avergonzaba no me importo, al parecer él tenía control total sobre mí- voy a entrar- ese pedazo de carne me estaba partiendo en dos, me dolía mucho, demasiado. Su mano me masturbaba al mismo tiempo para que sintiera más placer que dolor, cuando estuvo totalmente adentro se quedo quieto

-feliz cumpleaños susu- empezó a embestir de manera ruda, mis mejillas estaba sobre la alfombra apoyado en mis hombros, no podía parar de gemir, tocaba una y otra vez ese punto

-ha, Changmin más, más- sus manos apretaban mis caderas imponiendo un ritmo demencial, sentía un calor recorrer todo mi cuerpo, me vine antes que él. Aun así siguió arremetiendo contra mi trasero lo que provoco que me pusiera duro de nuevo

-Junsu haaa, me vendré, adentro- no pude decir nada, ya sentí su liquido caliente muy en mi interior

-Changmin… pervertido- Minn sonrió, se dio cuenta que yo aun no me venía, me hizo darme vuelta y comenzó a masturbar mi pene con su boca, estaba tan caliente que sentía que me derretiría en cualquier momento. Mi mano agarro sus cabellos haciendo que fuera más rápido- haa, Minn, haa así que rico- me senté apoyado en mis manos y tire mi cabeza hacia atrás al sentir ese calor recorrerme de nuevo, intente alejarlo para no venirme en su boca pero él lo impidió, trago todo. Me tire sobre la alfombra intentando regular mi respiración, él estaba sobre mi pecho

-aun así fuiste el de abajo, creo que te tomare más seguido-

Estábamos comiendo en ese hermoso restaurant, había un piano embelleciendo la acústica, me sentía tan bien estando con Changmin a mi lado

-ves, te dado doble regalo, espero que cuando lleguemos me recompenses como es debido-

-es que quieres una relación o sexo desenfrenado- hizo como si lo meditara

-ambas estarían bien- el sonrío, yo le pegue por debajo de la mesa, como respuesta tomo mi mano y la beso, es un tonto

-te amo- yo tomé su mano y la acerque a mi boca lamiendo sus dedos sin que nadie se diera cuenta

-yo también te amo Minn-

Llegamos a mi departamento bien tarde después de la cena él se tiro en la alfombra y encendió la tele para que viéramos una película, cuando sentí sonar el timbre, fui a abrir y allí se encontraba Yoochun

-hola su, vengo para que salgamos de fiesta- lo mire incrédulo, decidí disculparlos por el error de ayer pero aun no me deseaba mi feliz cumpleaños

-para nada más- el me miro sin comprender- mi cumpleaños, o se les olvido-

-¿no fue ayer?- se gano un portazo en la cara y me fui donde Changmin

-¿Quién era?- me acurruque en sus brazos, el pasaba su mano por mi espalda de arriba abajo

-nadie importante- lo bese, sabia lo que estaba esperando y, ¿por qué no?, la noche es joven.